El Ayuntamiento de Sevilla ha implementado una serie de medidas para combatir los efectos del calor tanto en el espacio público como en los servicios municipales, con especial atención a la protección de los grupos más vulnerables de la población.
En términos de adaptación urbana, se ha acelerado la creación de zonas de sombra utilizando soluciones naturales, como la plantación de más de 10.000 árboles en los últimos dos años. Además, se han instalado toldos en 26 calles de la ciudad, extendiéndose este verano por primera vez a la concurrida Avenida de la Constitución en el centro histórico.
Los centros cívicos municipales, presentes en todos los distritos, permanecen abiertos al público hasta las 14:30 o 15:00 horas, ofreciendo espacios con climatización adecuada donde los ciudadanos pueden resguardarse del calor durante las horas más calurosas del día.
En el ámbito social, el Ayuntamiento ha reforzado el Dispositivo Especial de Verano para personas sin hogar, ampliando el número de plazas a 114 cuando se activa el aviso amarillo por parte de la AEMET. Esta iniciativa incluye la distribución de agua, recomendaciones para hacer frente al calor y la derivación de casos a los centros de acogida.
Además, se ha intensificado la labor de la Unidad Municipal de Emergencias Sociales y Exclusión Social, con un mayor número de profesionales y unidades móviles para mejorar la capacidad de intervención.
En cuanto a las nuevas medidas adoptadas por el gobierno de Sanz, se destaca la apertura de la Sala Gordillo con servicio de aire acondicionado, el refuerzo de Protección Civil, el funcionamiento de piscinas municipales y la ampliación de horarios en centros cívicos y pabellones deportivos.
Estas acciones buscan garantizar el bienestar de todos los ciudadanos durante los meses de calor intenso, brindando espacios seguros y servicios adicionales para hacer frente a las altas temperaturas.
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